miércoles, 8 de mayo de 2019

155 años y contando...

Me pregunto qué habrá cruzado en la mente de Henry Dunant el 17 de febrero de 1863, en aquella reunión donde otros colegas valoraron su libro Un souvenir de Solferino, para darle forma a lo que alguna vez fue un suspiro, algo apenas más que un pensamiento idílico... ese día se sentaron las bases ideológicas de una institución que se convirtió en un baluarte de esperanza en tiempos complicados.

Committee of Five Geneva 1863.jpg
Public Domain, Link

¿Qué habrá pensado cuando el primer comité de la Cruz Roja llamó a los países a su primera convención en Ginebra? Aunque tuvo que lidiar con celos profesionales de sus colegas, la estrechez económica y sinfín de obstáculos logró que la fundación de la Cruz Roja mantuviera sus ideales. No imagino si alguna vez concibió que se convertiría en el ícono mundial que es hoy.

Si bien en 1901 recibió el Nobel de la Paz y cosechó sus merecidos logros, me entusiasma su historia y fue un bastión fundamental cuando tuve el alto honor de ser delegado de la Cruz Roja en el Estado de México durante el sexenio pasado. 

Ante semejante reto el trabajo diario, intenso y comprometido de todos los voluntarios con quien tuve el orgullo de convivir pagó sus dividendos y logramos ampliar no sólo la cantidad de consultas, atención a heridos en accidentes y ayuda en casos de desastre, sino la infraestructura hospitalaria creció significativamente. 



Este trabajo se consiguió con disciplina, constancia y confianza. Actualmente somos 13 millones de voluntarios que en más de 100 países atienden los momentos más críticos para la población, desde desastres naturales, accidentes de todo tipo, guerras, etc. Siempre en el epicentro de las más complejas situaciones con la misión de dar apoyo, atención médica y documentación de los eventos.

Hoy conmemoramos en todo el mundo a nuestra Benemérita Institución, el mundo vive una situación crítica de violencia, pobreza y afectaciones climáticas, a cada quien nos toca poner un granito de arena para tener una sociedad mundial más sana y educada. 

Es por eso que es fundamental la participación de la misma, donando no sólo dinero, si también de lo más valioso: TIEMPO. La Cruz Roja Mexicana constantemente da capacitación sobre primeros auxilios, qué hacer en casos de emergencia y diversos cursos para que nuestra sociedad mexicana este mejor preparada ante cualquier eventualidad. Es indispensable que participemos ya sea donando o capacitándonos.

Es un día muy especial, de muchos recuerdos que dan fuego al espíritu ante los nuevos retos. A seguir construyendo por un México mejor.

José Miguel Bejos